La Fuerza de la gratitud

Ser agradecido es una de las actitudes más bellas y que más transformaciones puede provocar en el ser humano.
Pues bien, nos sentimos regocijados al ver la salud restaurada de Florentina Cortez, quien el pasado mes de abril llegaba aquejada por un bloqueo auriculoventricular y miocardiopatía isquémica que no le permitía llevar una vida normal.
La Fundación “Puente de Solidaridad” lleva adelante el Programa de Marcapasos, destinado a ayudar a pacientes que requieren la implantación de dispositivos cardiacos complejos. En 15 años de trabajo contemplamos a la fecha la experiencia de “milagros” para muchas familias y comunidades, todo por el amor y la consecuente solidaridad de quienes las rodeaban y rodean todavía. Todos esos milagros son resultantes de la donación de muchos aspectos de personas de buena voluntad, médicos y otros profesionales de salud que vienen apoyando a alrededor de 1391 pacientes, en Cochabamba, Santa Cruz y Tarija.

Florentina nos agradeció obsequiándonos deliciosos bizcochos y dulces de su natal Cotoca.
Con ese espíritu de confianza en las puertas abiertas de una Obra que está al servicio de los que pocas o ninguna oportunidad tienen en muchos aspectos tales como el de la salud, es que Florentina llegó a Puente de Solidaridad, con la salud quebrantada y una situación socio económica que nos moviliza, a fin de que sea apoyada con el implante de marcapaso que se le hacía necesario. Bendito sea el Dios que nos une que, gracias a Su bendición en todo el proceso, se tuvo el resultado esperanzador de bienestar de nuestra querida hermana Florentina.
Es así que, cargada de emoción y dicha llegó a decirnos “Gracias”, una palabra corta y fácil de pronunciar; pero que conlleva un profundo significado y un potencial muy poderoso para nuestro equipo de trabajo que se fortalece por esos “milagros” de la vida, al ver estas expresiones de cariño y gratitud, no por nosotros, sino por el que nos une en esta opción de servicio, como una comunidad de creyentes que se esfuerza por dejar en claro que “La fe en Dios nos permite VER lo invisible, CREER en lo increíble y RECIBIR lo imposible”.
Florentina no llegó sola hasta nuestras oficinas, también sentimos el abrazo cariñoso de su familia proveniente de la tierra del Santuario amado por muchos bolivianos…Cotoca! Compartimos con ellos como una sola Comunidad, la vida y los deliciosos “horneados” típicos de su pueblo, como muestra de su afecto y gratitud. Lo esencial es que las gestiones realizadas como Puente de Solidaridad fueron con el ánimo de que Florentina luzca un semblante alegre que, hace que su familia también se regocijé al verla sana actualmente. Dios la acompañe siempre y bendiga la vida que el Señor le ha confiado para vivir en plenitud y haciendo el bien a otros, también.

Nuestra compañera en este servicio, Lic. Carmen Salses – Trabajadora Social de la Fundación, quien muestra el rostro de Dios Amor a tantos pacientes, fue quien recibió tan linda muestra de gratitud.